En los países más desarrollados se está produciendo un gran descenso del consumo de tabaco. Además el aumento de los impuestos por parte de algunos países está aumentando la presión sobre las tabaqueras. Estas empresas están buscando salidas a su perdida de cuota de mercado con productos que cambien esta tendencia. Están intentando rediseñar y mejorar el concepto de cigarri­llos electrónicos, dando al fumador la mayor similitud posi­ble e intentando aminorar los riesgos del fumar; estas estrategias han sido ampliamente utilizadas en el pasado y tienen el único fin de perpetuar su negocio. Recientemente uno de los directivos de Philip Morris International manifestaba que “nuestros clientes están evolucionando a consumos más seguros, podemos evolucionar con ellos o salir del nego­cio”. Las multinacionales tabaqueras se permiten incluso hablar de reducción del riesgo, haciendo suya una estrategia de salud pública, defendida por grupos involucrados en el control del tabaquismo, pero controvertida sobre cuándo y cómo debe aplicarse.

Desde los años 80 las grandes tabaqueras vienen comercializando distintos productos similares al cigarrillo convencional, que hasta ahora no han conseguido el apoyo mayorita­rio de los fumadores. Tras la irrupción de los cigarrillos electrónicos, y al estar muchos fuma­dores cada vez más concienciados con su salud, han con­siderado que podría ser tiempo de una nueva estrategia. Tras haberse comercializado en otros países desde 2014, se ha introducido en España un producto (IQOS), existiendo otros en espera de ser comercializados (GLO, iFuse). Estos productos se promocionan como una nueva forma de consumir nicotina, aunque la regulación es similar a la de los cigarrillos tradicionales.

La tabaquera mantiene que es un tipo de cigarrillo “en teoría menos dañino” que el tabaco convencional, por lo que hablan del concepto de tabaco de bajo riesgo. Contienen tabaco real basado en mezclas de diferentes tipos que se muelen y mezclan con glicerina vegetal y otras sustancias secretas, se fijan con fibras naturales de celulosa y con goma guar para mantenerlo cohesionado. Se diferencian de los cigarrillos convencionales en que esta vez no hay combustión (HeatNotBurn), sino que se produciría un calentamiento con un soft­ware especial, con lo cual no se alcanzarían las temperaturas del quemado convencio­nal (350° frente a los 800° del tabaco convencional).

Ese punto de calentamiento no es casual ya que afirman que por encima de 400° el tabaco sufre pirolisis provocándose la liberación de los productos tóxicos, lo que generaría un vapor distinto al humo habitual consiguiéndose además el impacto de nicotina a nivel de los receptores cerebrales. Esto también lo diferenciaría de los cigarrillos electrónicos puesto que, en general, sus líquidos son de absorción más lenta con un impacto menor.

Según los fabricantes sería como un cigarrillo electrónico mejorado. Esto refrenda por dónde van las investigaciones de las grandes tabaqueras, pero está en contradicción con los estudios químicos que siempre han encontrado que la corriente lateral del humo del tabaco (producida a unos 300-400°) contiene una mayor densidad de elementos tóxicos que la principal, ya que es fruto de una combustión más incompleta.

Parece que las tabaqueras están intentando mantener a toda costa la confusión respecto a estos nuevos cigarrillos y los electrónicos haciendo equiparable humo con vapor o al revés. Un problema de los cigarrillos electrónicos es que alteran bastante el ritual del fumar; este ritual en el caso de estos nuevos cigarrillos se conserva en gran parte (cajetillas, se adquie­ren en estancos y tiendas de siempre, de fácil accesibilidad e identificación); además la manera de fumar es similar a la de los cigarrillos tradicionales. En poco tiempo el fumador seguramente podrá elegir incluso sus marcas y sabores favoritos.

Por otra parte, algunas de las normativas y restricciones europeas podrían ser soslayadas por estos nuevos productos: cuestiones como la fiscalidad, publicidad, empa­quetamiento, emisiones o trazabilidad pueden verse afectadas y manipuladas por la maquinaria de lob­bing de estas empresas, que ya están actuando con todos sus recursos en su propio interés.

Los fumadores de estos productos refieren que el sabor es diferente. No hay humo (por definición, se denomina humo al fruto de una combustión), sino vapor (en esto, se parecen a los cigarrillos electrónicos). La experiencia sensorial es parecida a la del cigarrillo convencional; algunas personas mantienen que a un fumador ocasional le podría ser suficiente, pero a un fumador duro no le aportaría gran cosa (podríamos recordar al cigarrillo ligth en los mismos términos).

Presentan mayor eficiencia a la hora de fumar: en estos nuevos productos no hay corriente lateral y la generación de calor es constante y previa al momento de fumar (hay que esperar a que los cigarrillos se calienten), por lo que serían más eficientes, con menos tabaco podrían conseguirse los mismos resultados. Es probable que estos productos estén destinados a conseguir generar y mantener la adicción con mayor facilidad.

A día de hoy y mientras no se estudie adecuadamente no es posible asegurar que sea menos tóxico que lo que tenemos hasta ahora, aunque podrían serlo. Lo que se puede aseverar con toda seguridad en la actualidad es que es adictivo y tóxico para la salud. Si estos productos se expanden ampliamente en el mercado de tabaco, como se intuye que pueden hacerlo, debemos estar preparados para responder con rapidez y proporcionar conocimientos precisos ante el nuevo reto que se avecina.

Desde SEDET consideramos que estos mecanismos de venta de nicotina, sustancia altamente adictiva y tóxica, siguen siendo una manera sibilina de perpetuar un negocio que provoca daños en la salud de las personas fumadoras y que tan solo persiguen lavar su imagen y continuar con su negocio.

 

RESUMEN CARACTERÍSTICAS PRINCIPALES

  Cigarrillos convencionales Cigarrillos electrónicos Nuevos productos (IQOS,…)
Combustión NO NO
Requiere calenta­miento previo NO SÍ (para absorción más rápida)
Nicotina SÍ (algunos pocos no)
Tabaco NO
Residuos sólidos (tipo ceniza) Externos Internos Internos
Corriente lateral primaria NO NO
Corriente lateral secundaria
Promocionados como… Más saludablesÚtiles para la cesación Más saludablesPara quien no quiere dejar de fumar
Capacidad de  generar adicción SÍ (quizá algo menos)
Capacidad de mantener adicción