En 2016 en la revista N Engl J Med. se publica el estudio Cardiovascular Safety of Celecoxib, Naproxen, or Ibuprofen for Arthritis. en el que se concluye que: «En dosis moderadas, se descubrió que el celecoxib no es inferior al ibuprofeno o al naproxeno con respecto a la seguridad cardiovascular. (Financiado por Pfizer)».
En 2017 en la revista Circulation se publica, por parte de Garret A. FitzGerald, con el título de ImPRECISION: Limitations to Interpretation of a Large Randomized Clinical Trial, un análisis de ese estudio concluyendo que: «En resumen, hay tantos problemas con la interpretación de PRECISION que no informa la práctica clínica. Por lo tanto, a pesar de la inscripción de más de 24,000 pacientes y más de una década de estudio, no estamos más cerca de poder asesorar a los millones de pacientes con dolor artrítico crónico con respecto a la eficacia relativa y la seguridad de los tratamientos disponibles para ellos. Tal decepción indica la necesidad de alejarse de instrumentos tan poco contundentes como los ensayos mal diseñados para realizar estudios profundos de fenotipado que identifiquen los factores que predisponen al beneficio y al riesgo a nivel individual, con los que aportar más precisión al uso de AINE».
En 2018: desde la institución Public Citizen se hacen sobre ello las siguientes consideraciones:
Resumen: «Es desafortunado que un ensayo tan grande no sea útil para informar a los comités de guías clínicas, las autoridades reguladoras o los médicos en ejercicio sobre cómo manejar pacientes con OA o AR con un riesgo CV verdaderamente alto cuando necesitan terapia con AINE «.
En testimonio ante una reunión del Comité Asesor de Artritis de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y el Comité Asesor de Administración de Riesgos y Seguridad de Medicamentos, Public Citizen argumentó que debido a las principales limitaciones del ensayo PRECISION, no se pueden extraer conclusiones significativas del ensayo la seguridad cardiovascular de celecoxib en relación con ibuprofeno y naproxeno.
«Este ensayo no fue diseñado para abordar las diferencias en la probabilidad de una interacción de AINE con dosis bajas de aspirina. Tanto el ibuprofeno como el naproxeno interactúan para socavar la cardioprotección sostenida por la aspirina; sin embargo, la COX-2 no existe en las plaquetas, con el riesgo de un sesgo intrínseco a favor de celecoxib. Los pacientes no fueron asignados al azar en cuanto al uso de aspirina, y no hubo una medición objetiva de la acción de la aspirina. No sabemos si la aspirina se tomó tal como se prescribió (in≈45%) desde el principio y si se interrumpió o se inició durante el estudio, ya sea por prescripción o por acceso del paciente a este medicamento de venta libre. Por lo tanto, se desconoce quién tomó aspirina durante todo el estudio y si, si lo hicieron, los eventos cardiovasculares podrían haber tenido lugar en los grupos de ibuprofeno y naproxeno debido a una interacción que socava los efectos antiplaquetarios del medicamento «.
Después de revisar muchos de los defectos de PRECISIÓN señalados previamente en la revisión ImPRECISION, concluyeron que: «Es desafortunado que un ensayo tan grande no sea útil para informar a los comités de guías clínicas, las autoridades reguladoras o los médicos en ejercicio sobre cómo manejar pacientes con OA o AR con un riesgo CV verdaderamente alto cuando necesitan terapia con AINE «. 8
Gareth Fitzgerald:
«Por lo tanto, el ibuprofeno y el naproxeno, pero no el celecoxib, pueden interactuar para socavar los efectos inhibidores plaquetarios de la aspirina en dosis bajas. De modo que, como sugerí en 2005, afirmaría que el resultado de este ensdayo será imposible de interpretar.«Varios miembros del comité asesor, en esa reunión, también expresaron escepticismo sobre el aprendizaje de algo nuevo a partir de los resultados del estudio PRECISIÓN, que pueda cambiar la regulación de la FDA sobre estos medicamentos.