Según recomendación reciente (28 de Febrero 2017) y bien fundamentad de Essencial de la Agencia de Calidad y Evaluación Sanitarias de Catalunya (AQuAS)
- El diagnóstico de la rinosinusitis aguda (RSA) se basa en la historia clínica y en una exploración física adecuadas.
- La radiografía de senos no mejora la adecuación diagnóstica del RSA del adulto, no permite diferenciar entre la etiología vírica o bacteriana y no modifica la conducta terapéutica.
- No estaría indicado solicitar una RX de senos en la RSA no complicada del adulto ya que no aporta ningún valor en el abordaje de esta patología y, en cambio, puede suponer un riesgo para el paciente y un gasto innecesarios
La rinosinusitis aguda se define como la inflamación sintomática de la mucosa de los senos paranasales y de la cavidad nasal que tiene una duración máxima de 12 semanas, según el consenso de guías clínicas más recientes. Teniendo en cuenta que, en casi todos los casos, la afectación de los senos paranasales se acompaña de inflamación de la mucosa nasal contigua, las últimas guías han optado por adoptar el término rinosinusitis, en vez de sinusitis, para hablar de esta patología.
Aunque su etiología puede ser diversa, la mayoría de casos son producidos por una infección viral del tracto respiratorio superior y, en menor frecuencia, por una infección bacteriana. Se estima que el 0,5-2% de las infecciones víricas de las vías respiratorias superiores se complican con una infección bacteriana secundaria y que, durante un episodio de rinosinusitis aguda (RSA), la prevalencia de infección bacteriana es del 2- 10% y de infección vírica del 90-98%.
La prevalencia de la RSA en la población general oscila entre el 6 y el 15% según los estudios y su impacto en términos económicos y de salud es elevado, ya que afecta la calidad de vida y la productividad laboral. Es un motivo de consulta muy frecuente, sobre todo en la atención primaria y los servicios de urgencias, y genera un elevado consumo de fármacos.
La mayoría de guías clínicas consideran que es necesaria la presencia de al menos 2 síntomas para establecer el diagnóstico de RSA, principalmente la descarga nasal anterior o posterior, la congestión u obstrucción nasal, la presión o dolor facial y la disminución del olfato . Otros síntomas que apoyarían el diagnóstico serían la fiebre, la cefalea, el dolor dental, la tos, el dolor o presión en el oído, la fatiga y la halitosis. Se sospecha que la etiología es bacteriana cuando los síntomas persisten más allá de los 7-10 días o cuando, después de una mejora inicial, estos vuelven a empeorar y duran más de 7-10 días.
Aunque el diagnóstico de la RSA se basa en la historia clínica y en una exploración física adecuadas, en la práctica clínica no es infrecuente la realización de alguna exploración complementaria para confirmarlo. Tradicionalmente la más utilizada ha sido la radiografía (RX) de senos.
Diversos estudios han puesto de manifiesto que la RX de senos no mejora la adecuación diagnóstica del RSA del adulto, no permite diferenciar entre la etiología vírica o bacteriana y, en resumen, no modifica la conducta terapéutica. Por lo tanto, la no realización de la RX evita retrasos diagnósticos, irradiación innecesaria para el paciente y gastos evitables para el sistema sanitario. Las últimas versiones de las guías clínicas canadienses, americanas y europeas y algunos organismos, como Semfyc e iniciativas como Choosing Wisely, han emitido recomendaciones al respecto, aconsejando la no realización del RX en casos de RSA no complicados. Sólo estaría justificado solicitarla en personas adultas en caso de RSA recurrente, sospecha de complicaciones o sospecha de otras patologías.
En Cataluña, los 46.442 diagnósticos de sinusitis aguda, se ha realizado una radiografía de senos paranasales en el 6,8% de los casos (Sisapo-Sistema de Información de los Servicios de Atención Primaria, 2016).
En conclusión, no estaría indicado solicitar una RX de senos en el RSA no complicada del adulto ya que no aporta ningún valor en el abordaje de esta patología y, en cambio, puede suponer un riesgo para el paciente y un gasto innecesarios. El diagnóstico de la RSA debe basarse en la historia clínica (evolución del cuadro y presencia de síntomas clave) y en una exploración física cuidadosas.